28 agosto 2007

Sueño



Hoy soñé un sueño de alocada orfebrería. No menudean estos sueños que enamoran.

Vivía en el palacio de mi única calle convertida toda ella en vivienda magnífica con lujo de espacios, rincones, ambientes, muebles, detalles y luz, todo muy confortable.

¿De donde me salen estos sueños?

Mi nueva casa era mi vieja calle y cuando alzaba la mirada veía la calle larga, apretada de luces doradas y fiesta, parecida a la de una gran ciudad que, a lo lejos por la noche, divisas como artificio de luces centelleantes.

Muy confortable.

Y luego me besaba una hermosa y desconocida mujer que repetía, ella sorprendida y yo impávido, una y otra vez, y un viaje en coche con una bicicleta desarmada en mi regazo medio asomada cayendo fuera de la ventanilla, golpeando la nueva carrocería, y el barro de una calle que se transformaba de súbito sin dejar de ser barro en cordilleras y valles como cuando en mis juegos infantiles los charcos eran lagos o mares o océanos o cielos reflejados con las densas nubes que creaba alborotando con un palo, ¿y el coche que se arrugaba y desarrugaba como un globo de aire?, ¿y los habitantes de la casa que hacían cola para lavar su ropa en una maleable y curiosa lavadora de tela?, ¿y los riquísimos pasteles que me comía antes de que se celebrara una boda familiar incomprensible con una multitud de invitados desconocidos?.

Sé que se puede esperar todo de los sueños, nada me sorprende. Llevo muchos años soñando y hasta hace poco no me di cuanta que los sueños acostumbran a escamotear definición a las imágenes. Son visiones de conceptos más que de realidades o simplemente son solo sueños. Por esto sorprenden cuando atesoran mucho detalle, precisión y barroquismo en su definición. Son más reales que la misma vida. Sentí despertar y no poder continuar el viaje por estas tierras luminosas y seguir retozando en estos sueños extraños, lúcidos, vívidos y armoniosos que casualmente me sorprenden.

3 comentarios:

Índigo dijo...

Que post más bonito, Cerillo, el dibujo también. Me ha gustado mucho. Es todo como muy optimista no? Un abrazo.

M dijo...

Tienes razón, Cerillo....a veces los sueños son tan confortables y tan abrigados que da lastima despertar.

fgiucich dijo...

Poder soñar, como tú lo haces, es un privilegio que no todos tenemos. Abrazos.