02 febrero 2007

La copia




El tiempo se nos concretó pensando sobre como optimizar nuestros pasos futuros con el conocimiento adquirido en desdichados pasos pasados.

No se puede sin acción contundente dejar de vivir y si vives no puedes dejar de pensar. El éxtasis, dicen, aparece en la mente en blanco y lo creo, aunque a mi cuando me desconcierto y la mente se me queda en blanco solo me pone en apuros, no me llega para el éxtasis.

O sea, que haga lo que haga, pienso. De ordinario pienso lo mismo sobre lo mismo y es el aburrimiento o el casual azar quien me impulsa en ocasiones a modificar el guión o explorar olvidos.

En su día no me sorprendió la constatación de que en el contenido del ADN abundara un exceso de información basura, (duplicados, inacabados, parciales, inservibles, inutilidades, deterioros, etc.) Esta es la dinámica general para todo. Nada se genera sin montones de desperdicios.

Así, hoy pensé en el tiempo extraviado en hacer duplicados, un problema de fe nunca solventado dado que la copia siempre modifica el original. Es cierto que esporádicamente el duplicado puede mejorar lo copiado y a veces suplantarlo con creces, aunque lo corriente es que la maraña de duplicados de copias o copias de duplicados se comporte como un tsunami que arrasa todo objeto de cualquier empeño.

No podemos vivir sin las certezas que nos fundamentan y tampoco sin las copias que exige nuestra inseguridad. Al fin solo nos quedan flacas certezas y copias, y son poco fiables, por esto nos encontramos a menudo intentado separar el grano de la paja y en esto quedamos en otro tiempo suspendido.

¿Dónde andarán mis originales? ¿Cual es el significado primero de las palabras? ¿Quién soy yo?

Navegar con dignidad en estos laberintos tiene mi absoluto reconocimiento aunque percibo que solo garantiza el saber navegar en laberintos. Distinción honorífica que merece el reconocimiento o la burla de otros laberínticos navegantes de estos océanos.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Todos tenemos laberintos inacabados de solucion , son nuestro refugio de pensamiento inutil ....kisses

Anónimo dijo...

yo me perdi en ntu laberinto, pero he encontrado un espacio sin palabras.

saludo cerillo, tiempo sin verte .

Índigo dijo...

No soy original, me copio a mi misma, me recopio: me gusta lo que pintas y lo que escribes. Un beso.

bajamar dijo...

Copias de los laberintos, no muy fieles a veces, son también las palabras...aunque tal vez, más que copias, sean decodificaciones, vivan los originales, laberinticos espacios que se pueden modificar constantemente, he ahí una propiedad que no siempre tiene la copia, creo, y el que lo lee, nunca lee la copia exacta, y menos el original...

un saludo

Zebedeo dijo...

Hacemos un duplicado por si acaso, por nuestra inseguridad que crea el poder perder algo que creemos irreemplazabale. Pero ¿de verdad lo es?

DUPLICADO:
Hacemos un duplicado por si acaso, por nuestra inseguridad que crea el poder perder algo que creemos irreemplazabale. Pero ¿de verdad lo es?

:-)

Acus dijo...

Es cierto que prácticamente para todo hay copias y duplicados..., pero ¿es lo mismo una copia que un duplicado?

Dentro del laberinto en el que nos hallamos sumergidos, bien por desconfianza, bien por costumbre adquirida, bien incluso por fetichismo, necesitamos hacer copias, crear copias de un original para aparentar seguridad, saber que todo lo que nos rodea está controlado por nosotros.

Copia hecha, dormimos más tranquilos. Y es casi peor, pues cada copia del original aparece con más defectos a tener en cuenta. Y no digamos si creamos una copia de una copia. Es una forma fácil de actuar, es un atajo en nuestra vida. La sencillez de copiar (baja calidad), frente a la complejidad de innovar, de ser original, la variedad (pero costoso).

Un duplicado, cual gemelo requiere mucha más atención. Se le debe "alimentar" por igual, con los mismos mimos que si del original se tratara. Doble trabajo para tamaña empresa.

Y muy de acerdo con tu mención a que generando, se crean desperdicios. Entonces mi propuesta sería: Doble trabajo, mayor cantidad de desperdicio. A veces duplicamos de forma innecesaria.

¿Qué dirían de esto los dobles de los famosos? ¡Sacrilegio! Pero ¿quién dobla a quién? El "doble" al famoso por las escenas arriesgadas, o el famoso al "doble" por las escenas sencillas...

Pero me salgo del cauce inicial cual laberinto de ríos para desembocar a un camino que no sé si lo he visto ya a lo largo del curso, si es un deja vù, o es una banal copia, tan mala que parece hasta original.

Cada cual con su conciencia, y en su propio laberinto, y todos, en el mismo...

Acus dijo...

P.D: En tus "salidas del laberinto", me tienes duplicado..., si ya decía yo que mis jaquecas las sentía el doble de fuertes...

alida dijo...

Muchas veces necesitamos una copia aunque estas no sean perfectas es necesario así, copia o duplicado no es perfecto pero es un mal necesario donde encontraremos la salida del laberinto si?
Un abrazo duplicado

fgiucich dijo...

Pensar mucho es, a veces, peligroso, pero es la ùnica forma de saber que estamos vivos. Abrazos.

Garrafal dijo...

C'est la vie!